Todo empezó con una idea. Un proyecto
Todas las habilidades necesarias en mi campo se adquieren con el paso del tiempo y con el empeño por aprender y formarse continuamente. Aunque todos los días sirven para tropezar y errar en decisiones, no es menos cierto que el manejo de las habilidades hard (conocimientos técnicos y del negocio), junto con las habilidades soft (liderazgo, comunicación, negociación, etc) han hecho que mi labor profesional se involucre con la empresa y ambos marquemos el rumbo para la consecución de los objetivos marcados.
Mi carrera como Ingeniero
Durante mi vida profesional, he adquirido las skills propias de los puestos por los que me he desarrollado. En base a esto, puedo nombrar, la gestión de equipos de trabajo no sólo de tu empresa sino también externos; el propio autoconocimiento no solo de mí mismo, sino de los demás y del entorno; el conocimiento del negocio y el cómo captar información; el poder de comunicación y de negociación para conseguir los mejores resultados; la capacidad estratégica para gestionar los proyectos empresariales que me encargan adaptando en todo momento dicha estrategia a los cambios del entorno; el uso de la llamada inteligencia emocional y social gestionando la motivación y confianza necesarias para el buen fin de los objetivos encomendados; etc.
Desde mis comienzos hasta el presente, mi desarrollo profesional me ha hecho adquirir, en base a estas habilidades, una capacitación suficiente para desenvolverme con la suficiente soltura para conseguir las metas propuestas. Desde diferentes perspectivas en un mismo sector se enriquecen los conocimientos y se descubren las ventajas e inconvenientes que cada puesto de trabajo tiene para afrontar cualquier tipo de reunión, negociación, o proyecto que me ha sido asignado.
La gestión de la crisis en el sector de la construcción ha dado su fruto, que no es más que la maduración de la persona y la capacidad de reacción ante situaciones difíciles.
Ésta, en pocas palabras, es mi carrera profesional.
